El papa emérito Benedicto XVI captado por paparazzi.

Cuando anunció su renuncia y durante el intervalo que aconteció hasta hacerse efectiva -el veintiocho de febrero de dos mil trece- el primer papa emérito de la historia, Benedicto XVI, prometió y aseguró que estaría oculto para el mundo aunque cerca de la iglesia; tristemente su deseo no se pudo cumplir.

Y es que tan solo pocos días después -seis para ser exactos- de que oficialmente renunció al Ministerio Petrino fue captado por una publicación italiana en el lugar donde decidió reposar hasta la elección de su sucesor: el Palacio Apostólico de Castel Gandolfo. 

La publicación semanal, originaria de Milán [Italia], ya tiene fama de indiscreta pues en mil novecientos noventa y siete publicó fotografías de la princesa Diana en su lecho de muerte; a su vez, volvió a ventilar a la familia imperial británica en dos mil doce al hacer públicas imágenes no autorizadas de la princesa Kate Middleton.

Así pues, en su ejemplar del seis de marzo [2013] el revista italiana Chi publicó bajo el título de exclusiva mundial las primeras imágenes de quien fuera papa del diecinueve de abril de dos mil cinco al veintiocho de febrero del dos mil trece.

Sin más, las imágenes [4] y dos extras, una del ejemplar físico y la otra de la portada del mismo.